Enuresis (emisión involuntaria de orina o mojar la cama) en niños.

La enuresis consiste en una emisión involuntaria de orina, también llamado de forma común, mojar la cama.

Este cuadro se da en los niños que se orinan de forma involuntaria cuando han superado la edad en que ya no deberían hacerlo. Normalmente a los cinco o seis años ningún niño debería orinar sin darse cuenta, salvo «accidentes» puntuales, generalmente relacionados con nervios o estrés.

La mayoría de los casos son de predominio nocturno. Es un cuadro que no es raro ver en las consultas y que en casi la totalidad de los casos se resuelve con el tiempo. Es importante tener en cuenta que si bien hacia los 28 meses los niños no necesitan pañal de día, no es raro que alcancen los cinco años necesitándolo por las noches.


Por qué se produce
Se cree que existe un cierto componente genético que la produce. En algunos casos este componente genético podría implicar un leve retraso en la adquisición del control de la vejiga por leve retraso madurativo, que sería transitorio. También se cree que estos niños podrían segregar un poco menos hormona antidiurética, lo que facilitaría la aparición de este cuadro. En otros casos parece que se produce el cuadro por estrés, como puede ser el cambio de hogar o de colegio.

Qué síntomas produce
El síntoma principal consiste en que el niño sigue teniendo emisiones de orina de forma involuntaria a una edad en la que se supone ya debe controlar esfínteres. Se puede clasificar de varias formas:
—Las primarias son aquellas en las que el niño aún no ha logrado pleno control de esfínteres. Son las más frecuentes.
—La secundaria es aquella que se da cuando el niño vuelve a mojar la cama tras al menos seis meses de aguantar bien la orina. En estas normalmente el pediatra descartará otras causas, entre ellas el estrés como el nacimiento de un hermano, infecciones como las de orina o hasta una posible diabetes.
—En función de si el niño está despierto o no se habla de diurna ó nocturna. Lo normal es que la enuresis sea nocturna, sobre todo en las enuresis primarias.

Cómo se diagnostica
Para considerar que un niño tiene enuresis debe presentar el cuadro durante al menos tres meses o bien constituir un auténtico problema para él.
Las diurnas tienen más relación con el hecho de que el niño se aguante la orina hasta el último momento. En estos casos el pediatra además descartará procesos que puedan desencadenarla, como las infecciones de orina ó cuadros de estreñimiento. A veces sólo se produce la enuresis porque existen pérdidas por ejemplo al reír ó por nervios.
Las que son nocturnas y diurnas a la vez a veces sí requieren estudios de imagen como una ecografía para descartar alteraciones anatómicas de riñones, uréteres y vejiga. Esta indicación siempre la debe hacer un pediatra ya que a veces no es fácil distinguirlas.
En muchos casos el pediatra podrá pedir una analítica de orina para comprobar que no existe infección de orina o incluso presencia de glucosa (azúcar), que es uno de los motivos que pueden inducir al niño a orinar mucho (y que también beba mucha agua) en el caso de que pueda haber una posible diabetes.
En los casos en los que se pueda sospechar alguna malformación urinaria (los menos frecuentes) puede que el niño necesite pruebas como una cistouretrografía miccional seriada (uso de radiografías con contraste en vías urinarias), ecografía u otras pruebas de imagen.

Cómo se trata
A veces es suficiente con tratar pequeños procesos de fondo que la pueden estar induciendo, como infecciones de orina no detectadas. La mayoría de los casos suelen constituir un leve retraso en la adquisición del control de la vejiga. Por eso en muchos casos la solución suele estar en un planificado programa de ejercicios en los que se requiere que los padres estén muy pendientes del niño con enuresis para saber cómo actuar. Entre las posibles técnicas están las siguientes:
—Dar premios por las noches en las que el niño no se orina (anotando en el calendario las “noches secas”)
—Procurando que el niño orine antes de ir a la cama y que no beba agua entre 1 y 2 horas antes de acostarse
Nunca regañar o castigar cuando el niño se orina, simplemente dejar de dar la gratificación y no anotar nada en el calendario
—Despertar al niño para que orine es una técnica muy incómoda sin una eficacia demostrada

Si bien la mayoría de los casos se resolverán con estas pautas es cierto que algunos niños pueden requerir otras técnicas como el uso de dispositivos que despiertan al niño cuando éste moja la cama al orinarse. Para que esta forma funcione el niño debe tomar el uso del dispositivo como una ayuda o un juego (debe conseguir que no suene). En caso de imponerlo como un castigo no será tan efectivo.

En los niños en los que la enuresis se produce como respuesta a una situación de estrés lo ideal sería detectar y revertir dicha situación. Cuando esto no es posible (cambio de domicilio o de colegio, etc.) puede ser útil la ayuda por psicólogo.

A veces hay niños en los que todas estas medidas no son útiles por lo que se recurre al tratamiento farmacológico, aunque parece ser que las recaídas con los dispositivos de alarma nocturnos son menores. El fármaco que se suele usar es Minurin®, un antidiurético similar a la desmopresina, que es una hormona que sintetiza el propio organismo del niño y que ayuda a que el niño se orine menos por las noches. El riesgo de este fármaco es que tiene efectos secundarios por lo que se debe usar siempre bajo supervisión médica. Unos pocos procesos (los mínimos) requieren tratamientos más complejos como por ejemplo cirugía. Sin embargo, este es muy poco frecuente.

Qué complicaciones puede presentar
En general son de tipo social ya que el niño siente vergüenza por no poder controlar la emisión de orina y por lo tanto se muestra reacio a integrarse con los compañeros o participar en actividades que requieran muchas horas fuera de casa o con personas menos conocidas.

Pronóstico
En general es muy bueno y salvo que haya alguna anomalía o problema de fondo (lo cual es muy raro) la mayoría se resuelven de forma espontánea, incluso sin tratamiento alguno. La mayoría de los casos suele revertir espontáneamente o con alguno de los tratamientos descritos.

Este contenido se ha elaborado utilizando información basada en evidencia científica. Pincha aquí para conocer las fuentes que se han utilizado para su elaboración.

4 comentarios en “Enuresis (emisión involuntaria de orina o mojar la cama) en niños.

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