La dislalia consiste en la incapacidad del niño para producir ciertos sonidos pero sin que exista ningún trastorno en la boca, garganta o sistema nervioso que se lo impida. Parece que se da debido a un retraso leve en la maduración que no tiene ninguna trascendencia a ningún otro nivel.
Qué síntomas produce
El niño no puede articular con facilidad ciertos sonidos como la «r» o bien simplifica algunos sonidos para hacer el habla más sencilla. Es frecuente, y de hecho sucede de forma normal, en todos los menores de cuatro años, donde a veces persiste durante un tiempo más sin que suponga ningún tipo de patología o trastorno.