El denominado síndrome del sueño retrasado en adolescentes consiste en un cuadro en el que, de forma normal, los adolescentes retrasan la hora en la que se despiertan por las mañanas.
Se produce porque en todos los adolescentes, de forma fisiológica (es decir, normal) se produce un retraso de la fase normal de sueño y por tanto del despertar diurno. Sin embargo, en algunos casos en los que no se instauran medidas adecuadas, puede constituir un problema ya que les impide llevar un horario normal, que incluso puede prolongarse durante años o, en casos puntuales, durante la vida adulta.