Las anfetaminas son sustancias estimulantes del sistema nervioso. Su mayor problema es que son de uso bastante frecuente entre los adolescentes bien para darse «atracones» estudiando (aunque su consumo ha descendido en este sentido) o como estimulante en fiestas y salidas nocturnas (donde el consumo no para de ascender al no apreciarse como peligrosas).
Otra de los aspectos que facilitan su uso es que se puede absorber incluso por las mucosas, lo que hace enormemente fácil su consumo de diferentes formas. El mayor peligro de estas sustancias es que su uso está muy extendido al no considerarse como de riesgo.