La reacción anafiláctica o anafilaxia es un cuadro en el que el organismo presenta una reacción alérgica severa frente a una sustancia. La forma más grave de esta reacción es la conocida como shock anafiláctico.
Esta reacción está producida por el propio sistema defensivo del niño como consecuencia del contacto con una sustancia, que generalmente suele estar en el ambiente que le rodea. En el caso de que esta reacción sea grave el organismo del niño puede entrar incluso en un fallo generalizado, que es lo que se denomina shock anafiláctico. Entre las sustancias que pueden producir este cuadro se encuentran fármacos, proteínas, alimentos como la leche, el huevo o los frutos secos entre otros, venenos de picaduras o mordeduras como los de abejas o serpientes, o bien pólenes o incluso contrastes que se usan para algunas pruebas radiológicas. A veces se desencadenan incluso por situaciones como el ejercicio físico intenso.