La fiebre en los niños es el aumento de temperatura que se suele producir por una causa patológica, en la mayoría de los casos una infección. Aunque siempre debe ser evaluada por un profesional, en muchos casos su origen reside en cuadros infecciosos leves, sobre todo virales. Sin embargo, suele ser causa de alarma. Por eso es importante saber, una vez evaluado el niño por un profesional, cómo tratarla en casa para no incurrir en un exceso o en un defecto de tratamiento de un síntoma que, de por sí, no tiene que producir problemas más allá de la sensación de malestar que genera. Entonces, ¿cómo se trata?
